Cuidando tus pies

Los pies son muchas veces los grandes olvidados de los cuidados personales y sin embargo unos pies cuidados hacen lucir mejor estética al llevar ciertos zapatos, zapatillas o cuando vamos a la piscina o a la playa.
El problema principal de los pies es en primer lugar el calzado, pues muchas veces solemos llevar zapatos estrechos o de forma "antinatural" para nuestros estimados y maltratados pies.

El calzado deportivo tampoco ayuda mucho, pues en numerosas ocasiones este tipo de calzado suele tener poca transpiración y puede ocasionar algún que otro problema.

Es necesario llevar zapatos que combinen la estética con el confort y rechazar todo zapato que nos duela.

La segunda consecuencia de los problemas de los pies, es la cantidad de horas que pasamos de pie o forzando un mal asentamiento (levantar peso, por ejemplo).

No podemos cambiar esta situación pues si tenemos que trabajar de pie, poco vamos a poder cambiar este problema, pero si que podemos disminuirlo si nos desprendemos de nuestro calzado cuando podamos (un clásico cuando estamos sentados en una mesa).

Es muy bueno utilizar un jabón exfoliante vegetal en nuestra higiene diaria, ya que el exfoliante elimina las impurezas y la piel muerta, ayudando a evitar callosidades.

El agua fría o el baño con agua fría y sal, va perfecto para relajar los pies después de una jornada laboral intensa o después de una excursión por la montaña, por poner algunos ejemplos.

También existen productos relajantes a base de gel frío, que también van estupendamente.

Y por último antes de ir a dormir, que mejor que un buen masaje, apretando bien, pero con suavidad. También un poco de gimnasia para los pies no esta nada mal, para ello es suficientes hacer unos minutos moviendo los dedos con el pie descanzo y hacer movimientos circulares para destensar los tobillos.

Fuente: Govinda Babii